Arco 6 [Web Novel] Capítulo 11 “La audible voz entre lágrimas”

 Arco 6 [Web Novel] Capítulo 11

“La audible voz entre lágrimas”

Créditos:

Inglés---> Witch Cult Translations

Español---> Ray

Corrección---> Robin

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ーーLo que había sido visible fue el brillo, nada más que eso.

 

Recordó que había inclinado su cuello hacia adelante.

También el momento inicial después de eso, una sección de la torre de enfrente, brillo blanco y que entrecerró los ojos por ese deslumbramiento.

Sin embargo, lo que yacía en sus recuerdos solo era hasta ese punto. No recordaba nada después de eso.

 

Ni dolor, ni el impacto, ni terror, no sintió ni una sola cosa.

Para Natsuki Subaru, todos estos eran sequitos indispensables en el advenimiento de la [Muerte].

No sintió dolor que le hiciera gemir en llanto, ni el impacto que dispersara su cuerpo en mil fragmentos, ni el terror de perder todo.

Por lo demás, esa [Muerte], podría haber sido una [Muerte] mucho más misericordiosa de lo que Subaru normalmente conocía.

Encima de todo, Subaru, que había muerto y su cerebro había sido evaporado, no tenía tiempo libre para pensar en ello, ni podía simplemente pensar de nuevo en ello y quedar absorbido.

 

Como en un abrir y cerrar de ojos, inmediatamente después de que lo pensó, su campo de visión había sido enjaulado dentro de la oscuridad, la vida [Perdida] de Natsuki Subaru fue resucitada, regurgitada y una vez más, abandonada en la realidad.

 

ーーFue abandonada.

 

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???: “ーーTchtchtch.”

 

Subaru: “ーー~hk.”

 

Por un solo momento, sintiendo el peso de la oscuridad sobre sus cinco sentidos, como si obstruyera su aliento, Subaru abrió los ojos.

Discerniendo el clamoroso sonido de toda la carrocería del carruaje dragón, sus músculos contrayéndose gritaron de dolor. Las riendas a las que se había aferrado tan fuertemente que sus uñas fácilmente podrían devorar sus manos y la cálida temperatura insistiendo su existencia, Beatrice.

 

Subaru: “… ¿Eh?”

 

Dentro de su pobre campo de visión, miro la parte trasera de la cabeza de Beatrice de cerca.

El violento y dulce aroma colándose en sus fosas nasales, una vez más, era diferente de aquel cuando había abrazado a la jovencita. La esencia de Beatrice era como de confitería recién preparada, pero lo que flotaba en el aire ahora mismo era como si fuera una adhesiva toxicidad, una presumida dulzura.

Tenía recuerdos de este dulzor. Era natural. Era solo que, recientemente había estado oliendo y sintiendo nauseas continuamente.

En lugar de ello, incluso si fue solo por un limitado número de minutos, lo que fue especial fue que había sido interrumpido.

 

???: “Tch, tch, tch, tch.”

 

La oscurecida consciencia de Subaru alcanzo un sonido rítmico, como si fuera el chasquido de una lengua.

Frente a sus ojos, estaba Beatrice con el cuerpo rígido y Patrasche que estaba conteniendo el aliento, vigilando lo que yacía delante de sus narices, el carruaje dragón que llevaba a Emilia y a Rem y de pie delante de ese carruaje dragón estaba una repulsiva Mabestia.

Finas raíces extendiéndose por todo su cuerpo, la truculenta Mabestia hambrienta de sangreーーse trataba de un Oso Cortesano.

 

Por un solo momento, incapaz de expresarlo como un deja vú, la fresca sensación de la realidad regreso a Subaru.

Esa sensación era indudable. Se trataba del [Regreso de la Muerte].

 

Natsuki Subaru justo ahora había, experimentando la [Muerte], regresado a este momento en el tiempo.

Subaru: “ーー~hk.”

 

ーー¡¿Pero, de todas la cosas, regresar a este momento?!

 

Más que el momento de transpiración de la [Muerte], maldijo lo desfavorable del momento al que había [Regresado de la Muerte].

Atrayendo el interés de la Mabestia por el sonido de chasquido de su lengua, aquel que estaba intentando removerla silenciosamente del frente del carruaje dragón era Meili. Esa idea era apenas exitosa, sin embargo, se cayó al final.

El dragón de tierra que jalaba el carruaje dragónーーGyan, no pudo soportar la presión de la Mabestia, esa fue la razón de ello.

 

“ーーーー”

 

Aunque al tanto de eso, Subaru dudo instantáneamente de emitir un juicio.

El estado del vital Gyan era invisible desde la parte trasera. Pero, Julius, que había apretado las riendas, no alentaría lo inusual del dragón de tierra. Simplemente no había nada inusual para que girara la vista hacía allí.

Cada uno de los que estaban en el carruaje dragón estaban rezando por el éxito del contacto de Meili con los osos Cortesanos.

Sin embargo, desafortunadamente eso fueーー,

 

Meili: “Tch, tch,tch… tch~.”

La voz de Meili cargaba una débil sensación de estrés, su dedo señalo hacia la derecha del carruaje dragón. Atraído por ese movimiento, el oso cortesano lentamente camino en esa dirección.

Un ambiente de consuelo se originó dentro del carruaje dragón y también en Beatrice. Sin embargo, Gyan no fue capaz de resistirse a cortar el hilo de tensión.

 

Subaru: “Juli…”

 

“ーーーー~hk!!”

 

Sin ser capaz de emitir el juicio correcto, su grito fue obstruido por el rugido de Gyan.

Como si pasara por la reciente progresión una vez más, Gyan, piso con fuerza el suelo mientras rugía y ante ese lamento y retumbos, las consciencias de los osos Cortesanos despertaron de una sola vez.

Posteriormente exponiendo sus ojos llenos de sangre, los ojos cortesanos saltaron con su baba derramándose. Resplandor blanco azulado perforo a través de esos cráneos, el flujo había sido completamente el mismo hasta la explosión.

 

Emilia: “¡¡El Huma!!”

 

Emilia, de pie encima del carruaje dragón, giro ambas manos como si aleteara en el viento y creó un remolino de cuchillas de hielo en el cielo con movimientos como los de un baile elegante. Las cuchillas de hielo giratorias fueron disparadas sucesivamente, con el objetivo ajustado sobre el suelo, como si fueran notas de un show musical, la pereza de los osos cortesanos fue devorada dentro de las letales armas de hielo, mientras elevaban sus llantos de muerte al ser cortadas sus extremidades.

 

Subaru: “¡¡C-Corre, corre, corre, corre, corre, correーー ~hk!!”

 

Jalando las riendas y acelerando a Patrasche, el carruaje también se movió cuando Subaru alzo la voz.

Miro a los lados, al conductor, Ram que repentinamente había aparecido habiendo intercambiado la posición de conductor con Julius y a Julius, esgrimiendo su espada, que lanzaba cortes sobre los Osos cortesanos acercándose junto una barricada de patadas, eso fue lo que él fue capaz de comprender.

 

ーーCompletamente lo mismo.

Al haber ido con la corriente, Subaru fuerte, fuertemente apretó sus molares.

 

Que su consciencia sea incapaz de ponerse al día, debido al repentino [Regreso de la Muerte] no serviría como excusa.

El corazón de Subaru cubrió su remordimiento aplazando el impacto de haber fallecido.

Se podría decir que desde que está consciente del [Regreso de la Muerte] hasta ahora, esta había sido la primera vez que Subaru había desperdiciado el [Regreso de la Muerte].

Al perderse de la información recibida por medio del [Regreso de la Muerte], el resultado era que simplemente se estaba dirigiendo hacia otra muerte. No obstante, esta era la primera vez que estaba rastreando la misma situación, a pesar del [Regreso de la Muerte], sin siquiera establecer un truco de alguna clase. La propia confusión de Subaru sin relación con sus intenciones, mientras piensa en eso el riel del destino seguía siendo el mismo.

 

Beatrice: “ーー ¡Subaru! ¡No hay tiempo libre como para que estés distrayéndote, de hecho!”

Subaru: “ーー ¡~hk!”

 

Subaru con la cabeza inclinada de remordimiento, estaba agarrando firmemente las riendas y Beatrice golpeo su espalda contra su pecho. Mirando por delante el ligero impacto y voz, fue capaz de ver la truculenta Mabestia avanzando rápidamente.

Al mismo tiempo, tomando la pequeña palma extendida, haciendo que Beatrice se ponga de pie encima del dragón, entonces comenzó el contraataque.

 

Beatrice: “¡Minya! ¡Minya! ¡Una vez más, Minya, supongo!”

 

A través de la palma, el Mana sin propósito dentro del cuerpo de Subaru, fue absorbido y convertido en poder para Beatrice. Los cristales violetas materializados perforaron dentro de los cuerpos de las Mabestias que obstruían su camino, y mientras los cristales rompían aquellos cuerpos, Patrasche avanzo mientras pisaba firmemente sobre los fragmentos dispersados.

 

Meili: “¡¡Mantente a la reser~va Lombriz de Arena!!”

Al escuchar el grito de Meili, que se había desesperado, la arena en la esquina de su campo de visión se levantó.

El desierto cubierto por osos cortesanos, haciendo su aparición de más abajo que eso, la lombriz de arena arrojo varios números de Mabestias dentro de sus enormes fauces, y recomponiendo su enorme estructura suficiente como para hacer que uno mirase hacia arriba, procedió a aplastar a sus enemigos.

 

La segunda gran batalla decisiva de monstruos, pero Subaru estaba al tanto de lo desfavorable que esto era.

 

Ram: “ーー ¡Barusu! ¡Corre hasta que mueras! ¡Si no quieres morir!”

 

Una voz de reprimenda fue lanzada sobre Subaru que se estaba interrogando impacientemente y sin forma.

Ram estaba controlando las riendas en la posición de conductor, conduciendo al agitado Gyan. Estaba conduciendo al carruaje dragón con completo control ya que su manejo de las riendas no era inferior al de Rem, pero, a este ritmo, esto no era nada bueno.

 

Subaru: “¡A este ritmo no será bueno si continúas yendo de frente! ¡Ram cambia de dirección!”

 

Ram: “ーー ¡~hk! ¿Qué estas tratando de decir? La Torre esta justo enfrente, ¡los alrededores son todos territorio de las Mabestias!”

 

Subaru: “Es posible, pero ¡aun así no será nada bueno!”

 

Patrasche bajo la cabeza y atravesó justo por el torso del oso cortesano de enfrente. Mientras tiene a la Mabestia retorciéndose junto frente a su nariz, el Dragón de tierra negro se apresuró furiosamente usando el cuerpo de la Mabestia como un escudo. Los continuos cortes martillados en él destrozaron el cuerpo de la Mabestia, sus danzantes pétalos y la sangre fresca que caen empaparon la arena.

 

Ram: “¡Barusu, de que te diste cuenta! ¡Dilo claramente!”

 

Subaru: “¡No habría problemas si pudiera explicarlo claramente! En cualquier caso, ¡es un cambio de curso!”

 

Ante las palabras de Ram, que tenían un tono irritante, todo lo que Subaru podía hacer era gritarle violentamente también,

Después de todo, el actual Subaru no estaba al tanto de la causa de su muerte.

 

Su [Regreso de la Muerte] era incuestionable y, aun así, no podía recordar la razón de su muerte.

Notándolo, con respecto al punto de [Regreso de la Muerte], esta vez fue cercana a como se sintió cuando se había encontrado con la [Muerte] por primera vez en la mansión Roswaal.

Desde el punto de confirmar la causa de muerte y eliminar ese problema.

 

Subaru: “¡¡El tiempo para eso no está por ninguna parte!!”

 

Al haber sido alcanzado por las Mabestias, había caído presa de aquellos cortes. Justo como le había advertido el cantinero, se había convertido en la cruel carnada y sus intestinos sorbidos. De otra forma, al caer inadvertidamente de Patrasche, podría haberse roto el cuello. Era una idea en verdad, realmente difícil, pero, podría haberse quebrado debido a que Beatrice utilizo su mana excesivamente, eso tampoco era imposible.

 

Subaru: “Cualquiera que pueda ser, hasta ahora los recuerdos no se han detenido repentinamente.”

 

Incluso si sus extrañas fueran abiertas, incluso si fuera sofocado en hielo, incluso si su cabeza fuera aplastada por un morningstar (Arma de Rem), incluso si todo su cuerpo fuera devorado codiciosamente por conejos, incluso si fuera comido por enredarse con una autoridad absurda, Subaru [Regreso de la Muerte].

E independientemente de cuál pudiera ser la causa, derrotar y eliminar lo que había ocurrido justo antes de su propia [Muerte] que estaba bloqueándolo,  había sido usado como método para eso.

 

Ese frágil hilo del destino, esta vez no estaba por ningún lado.

Y el tiempo para buscar ese fino hilo, no le fue otorgado a Subaru y los demás.

 

ーーEsta era simplemente la peor trampa del [Regreso de la Muerte].

 

En un escenario donde posiblemente falleció por el mismo método, sería un reinicio completamente torpe.

Antes de que eso paseーー,

 

Subaru: “¡Muévete de aquí! ¡Lo que sea que hagas, no te acerques a la torre!”

 

Ram: “De nuevo, por qué tan…”

 

Subaru: “¡La torre brillara! ¡Probablemente esa luz es peligrosa!”

 

Ram: “¡¿Hu~hーー!?”

 

En la situación en donde habían sido nada más que acorralados, ni siquiera Ram tuvo tiempo de barnizar con veneno sus palabras. Mientras chocaba con la voz que posee un franco tono de repudio, Subaru jalo las riendas y le comunicó eso a Patrasche.

No ir de frente, sino desviar su destino de cualquier forma.

 

Subaru: “¡La torre puede ser visible justo al frente, pero…!”

 

Justo en medio del avance de los Osos cortesanos en grandes números en el mar de arena, la torre de vigilancia justo frente a sus ojos claramente se estaba acercando. Sin embargo, lo que les esperaba si realmente se acercaban a ella era solo el calcinamiento de antes.

Para que eso no ocurra, lo que Subaru tenía que escoger eraーー,

 

Subaru: “¡Corre hacia atrás! ¡Sera mejor pasar por el [tiempo de Arena] una vez más! ¡Regresemos a esa duna de arena anterior!”

 

Ram: “Que disparates has estado…”

 

Emilia: “¡Ram! ¡Haz lo que dice Subaru!”

 

Ante la determinación en donde no se podría evitar pensar que él había perdido la cabeza, Ram levanto la voz con repudio, que Emilia detuvo. Mientras purgaba a las Mabestias con innumerables fragmentos de hielo, asintió a Subaru.

 

Emilia: “¡Porque no hay forma de que Subaru diga algo raro sin reflexionar en ello!”

 

Ram: “Barusu por lo general vive mojando sus pantalones con palabras imprudentes y disparates.”

 

Emilia: “¡Porque no hay forma de que Subaru diga algo raro sin reflexionar en ello en una situación peligrosa!”

Subaru: “¡¡Gracias por salirte del camino y corregirlo!!”

 

Si debiese lamentarse por ser tratado como un lobo vestido de oveja o estar encantado de ser un hombre en el que se puede confiar en momentos de apuro.

Dejando la introspección y vanidad para después, Patrasche se movió de acuerdo con las intenciones de Subaru, incrustando los pies sobre el suelo arenoso y repentinamente dio la vuelta. Su cola cortando el aire sesgo el abdomen de la Mabestia y pateando a uno de los osos cortesanos con su pierna, corrió hacia atrás.

 

Ram: “ーー ¡~hk! ¡¡Ustedes dos en el techo y a un costado! ¡¡Asegúrense de no caer!!”

 

Al ver su repentino giro, Ram hizo que Gyan también diera la vuelta manejando hábilmente las riendas. Naturalmente, el carruaje dragón teniendo que tragarse la fuerza centrífuga en ese momento, se inclinó fuertemente y se giró de lado, pero, ーー,

 

Julius: “¡Emilia-sama! ¡El punto de apoyo!”

 

Emilia: “¿Eh? Oh, ¿en serio? ¡Sí!”

 

Incrustando su espada ferozmente en la carrocería del vehículo y apoyando su cuerpo, Julius llamo la atención de Emilia para que le brindara ayuda con el carruaje dragón que se inclinaba. Emilia abrió bien los ojos ante aquellas palabras y poder mágico fue dirigido instantáneamente hacia debajo del carruaje dragón. Como si ayudara a la rueda que se había ladeado debido a la inclinación, una rampa de hielo surgió, y el carruaje dragón, como si dibujara un semi círculo, corrió y evadió volcarse.

Además, al mismo tiempo, sin detener el impulso, comenzó la carrera hacia atrás que seguía a Patrasche.

 

ーーInmediatamente después.

 

Subaru: “¡¿Qué… ~hk?!”

 

En el momento siguiente al comienzo de la carrera hacia atrás, resonó un rechinido metálico como si cortaran los tímpanos.

Subaru se encogió de hombros sin pensarlo. Desde la parte trasera, surgió un repentino vendaval.

 

Subaru: “El de ahora es… ¡Eh, oye, oye, oye, oye, oye!”

 

Beatrice: “Qué, supongo… ¡¿Eh?!”

 

Sintiendo que el enigma surge detrás, Subaru y Beatrice, dándose vuelta al mismo tiempo, expresaron asombro.

Encima del carruaje dragón que corre justo atrás de ellos, Emilia y Julius también abrieron bien sus ojos.

 

Meili: “La Lombriz de Arena-chan esta… ~hk.”

 

Meili estaba inclinándose hacia delante sobre el asiento de conductor, con su garganta temblando de asombro.

Frente a sus ojos en esa pose, un rostro detrás del carruaje dragón, como si lo ocultara con la gran estructura de la Lombriz de Arena siendo lanzada. Con un cuerpo de una envergadura de cerca de 10 metros, con grosor del cuerpo tal que dos hombres no podrían darle vuelta con sus brazos. Su cabeza sobresaliendo del suelo, la forma reinando sobre su presa parecía como si fuera el gobernante del mar de arena.

 

El cuerpo de esa lombriz de arena, al recibir es golpe directo de ese algo, fue volado en fragmentos.

Esa babosa piel corporal sufrió un millar de perforaciones y el grueso cuerpo de gran longitud fue espléndidamente dividido en dos. El cuerpo que había perdido su cabeza se volcó a los lados y la cabeza, habiendo perdido su soporte, lenta, lentamente se dirigió hacia ellos, chorreandoーー.

 

Subaru: “¡¡Apártate, esquivalo~o~o~oーー!!

 

La cabeza de la Lombriz de arena tenia una masa excesiva que podría aplastar el carruaje dragón bajo su presión.

Con la agónica muerte de la Mabestias aplastadas bajo la presión del cuerpo que hace un momento había caído detrás, Subaru y Ram subsecuentemente les comunicaron instrucciones a los dragones de tierra, desviaron sus rutas de forma dominante y escaparon del curso del golpe directo de la Lombriz de arena.

“ーーーー~hk.”

 

Dando lugar a una voz aguda y llorosa, la cabeza de la lombriz de arena cayó sobre el mar de arena con gran vigor.

La arena se arremolino, los huesos de los osos cortesanos lastimados al escapar se desmoronaron en pedazos y cayeron, y sus extremidades, habiendo sido atrapadas en el impacto fueron arrancadas. Al mismo tiempo, la cabeza de la lombriz de arena reboto mientras se enredaba con el inevitable futuro de las mabestias, se desplomo, y finalmente sufrió innumerables cortes rápidamente convirtiéndose en pedazos de carne.

 

Subaru: “¡¡Peli, peli, groso groso!!”

 

Beatrice: “¡Subaru, esto fue una equivocación, de hecho!”

 

Se habría sentido aliviado por evadir la crisis del momento, pero, instantáneamente Beatrice rechazo ese alivio.

Al mirar a la chica en su pecho preguntarse que había ocurrido, quito los revoloteantes pétalos con una expresión preocupada e inspecciono la parte trasera,

 

Beatrice: “¡Por lo de hace un momento, el carruaje dragón en el otro lado se ha extraviado, supongo! ¡Solo estamos Betty y tú!”

 

Subaru: “¡¿Qué dijiste?!”

Persiguiendo su mirada en pánico, Subaru confirmo la ausencia de la figura del carruaje dragón en los alrededores.

Solo el distante resplandor de mana blanco azulado y rugidos de Mabestias, además, descubriendo un lugar ligeramente expuesto al arenoso vendaval, pudo comprender por su vista a través de la inmensa distancia, la dura pelea que estaba dando Emilia y su nuevo sirviente, Meili.

 

No obstante, incluso si trataran de reunirse con el otro equipo, el espacio entre ellos estaba rebosante de innumerables osos cortesanos. Y para Subaru y el resto, con disminuido número de movimientos, no había ninguna indicación de que el feroz ataque de las Mabestias hubiera sido debilitado.

 

Subaru: “¡simple, con la mitad del potencial de guerra! ¡El numero de enemigos es el doble!”

 

Beatrice: “¡Comparado con hace un momento, ha incrementado a cuatro veces, supongo!”

 

Blandiendo las garras, en los rostros de los osos cortesanos que atacaban, la cúspide del látigo lanzo un rugido.

El impresionante impacto afortunadamente aplasto los ojos de la Mabestia y abriéndose paso por aquella que estaba temblando con violento dolor, Patrasche corrió una vez más. Sin embargo, ese curso tenía una dirección diferente a la del carruaje dragón de Emilia y los demás.

 

Subaru: “¡Patrasche! Por aquí no…”

 

Beatrice: “Es el juicio propio de este dragón de tierra para sobrevivir, de hecho. ¡En lugar de Subaru o Betty, dejárselo a sus instintos sería mejor, supongo!”

 

Interrumpiendo el reclamo de Subaru, Beatrice pateo y disperso las mabestias que se interponían en su camino con magia. Patrasche marco los puntos donde se encontraba el ajustado asedio y se abrió paso por ellos, arriesgando su propia vida para proteger a los dos sobre su espalda.

 

Subaru: “¡Mierda! De nuevo esto… ¡De nuevo esta forma! ¡Que estoy haciendo!”

 

Agitando el látigo, golpeo las caras de las Mabestias intentando acercarse. No obstante, con esto no sería capaz de detener el poder de las mabestias, que tenían una expresión de haber perdido la razón.

Infringiendo heridas fatales con el sable, afilo su dinamismo con magia. ーーEl poder que Subaru escogió, incluso con cualquiera de ellos, no sería ni remotamente asequible. Toda astucia, seria aplastada bajo la presión de un poder abrumador.

 

Hacer lo que podía hacer, aumentando cualquiera que fuera la habilidad que tuviera, se habría vuelto ligeramente más fácil, es lo que pensó, y sin embargo.

La mera astucia superficial de Natsuki Subaru, el destino solo iba a suspirar de risa y pisotearla y aplastarla.

 

Subaru: “¡De alguna manera en su momento me las arregle mejor con ese asqueroso bastardo de Regulus…!”

 

Beatrice: “¡No hay tiempo para pensamientos tan profundos, de hecho! Hay alguna forma de…”

 

Subaru: “Beako ¡Murak sobre Patrasche! ¡Aligera su peso y entonces podremos cruzar sobre la multitud!”

 

Beatrice: “ーー¡…! ¡Murak!”

 

Aceptando las instrucciones de Subaru, Beatrice utilizo [Murak] sobre Patrascheーーuna magia que disminuyo el efecto de la gravedad, y la velocidad a la que corrían se aceleró mucho más. Dando un paso y corriendo hacia adelante, la distancia se duplicó, y saltando Patrasche utilizo a las Mabestias como un lugar para pararse, e intentó retirarse del prado de flores retorciéndose.

Peroーー,

 

Subaru: “¡¿La luーー?!”

 

Muy cerca de sus ojos apareció una purga blanca y en el momento que abrió la boca, [Eso], corrió por el cielo.

La purga blanca corrió por encima del suelo y el mar de arena fue mandado a volar por la terrorífica fuerza. Enfrentando el repentino rayo de purga, los cuerpos de las Mabestias fueron destrozados, escupiendo sangre mientras saltaban, y saltaban, y saltaban.

Y esa repercusión se abalanzó también sobre Patrasche, agitada por la presión del viento de [Eso] que estaba acercándose al gran cuerpo del dragón de tierra, y se volcó fácilmente.

 

Subaru: “¡Beatrice! ¡¡Sujétate fuerte!!”

 

Beatrice: “¡¡Subaru, tú también asegúrate de abrazarme firmemente, supongo!!”

 

Patrasche: “ーーーー~hk!”

 

Patrasche relincho y Subaru abrazo y se aferró al cuerpo de Beatrice.

Rotando y girando en el aire, la gran estructura de Patrasche salto por encima de los osos cortesanos. Como si persiguiera a ese Patrasche, la corona continúo lloviendo incesantemente.

La arena estallo, las Mabestias que fueron arrastradas y tuvieron que recibirla estallaron, y Patrasche que aparecía y desparecía levanto un eco de angustia.

 

Subaru: “¿¡O~a~a~a~a~a~hーー!?”

 

En medio del ataque, la [Protección Divina de evasión del Viento] fracaso y Subaru saboreo por completo ese impacto.

Agarrando las riendas y a Beatrice, había interpuesto firmemente ambos pies en la silla de Patrasche, pero, agitado por la fuerza, su cuerpo al ser golpeado fuertemente en partes por aquí y por allá, apenas se las arregló para mantenerse consciente.

Sin embargo, a pesar de ese estado, la persecución de las garras de los osos cortesanos continúo disparándose bajo sus ojos.

Atrapado en el terrorífico ataque, se tambaleo sin ser arrojado. Si llegara a caer ahora, de ninguna manera se salvaría.  Lo que apenas conectaba su vida, era precisamente que no se había rendido.

 

Subaru: “Pero, a este ritmoーー”

 

Beatrice: “Nada bien, de hecho… ~hk!”

 

Subaru: “ーー ¡¿Patrasche!?”

 

Con el impacto notablemente fuerte, el rugido de angustia de Patrasche tiro de su larga cola.

Al mirarlo, el costado de Patrasche, quien estaba rodando ligeramente por el efecto de Murak, había quedado expuesto a las garras de los osos cortesanos y había sido cortado. Con las cicatrices de las garras grabadas en las negras escamas, dolorosas incluso de mirar, sangre fresca estaba fluyendo y derramándose de la boca de la profunda herida.

 

Subaru: “ーー~hk, kh, ¡¿ah!?”

 

Desplomándose con el mismo ritmo debido a esa fuerza, Patrasche repentinamente cayó encima del desierto. Al mismo tiempo, Subaru y los demás también fueron lanzados sobre el arenoso suelo y quedaron abandonados sobre el campo de alimentación de los osos cortesanos que abarrotaban sus alrededores.

Agitando su cabeza, su cuerpo se levantó. Mientras continuaba sosteniendo la mano de Beatrice. Ella también se sacudió el dobladillo de su vestido y se puso de pie y rápidamente observo los alrededores sin ningún descuido en sus ojos. Sin embargo, la ventaja de ellos era innegable.

 

Subaru: “¡Bastardos! ¡No se atreven a poner un solo dedo sobre Patrasche!”

 

Beatrice: “¡Minya!”

 

Herida, Patrasche gimió de agonía, mientras la magia atravesaba las Mabestias que la inundaban. Subaru jalo la mano de Beatrice, corrió hacía Patrasche y arrodillándose toco la herida.

Las garras no habían alcanzado sus intestinos, pero, si se esforzaba, sus entrañas podrían salirse. No se le podía permitir esforzarse. Él también necesitaba tiempo para curarla.

 

Subaru: “¡Beatrice! ¡Shamak! ¡Engaña la percepción de las Mabestias alrededor!”

 

Beatrice: “¡¿Ahora?! ¡Incluso si se realiza, no hará más que ganar tiempo, de hecho! Además de eso…”

Subaru: “¡Ese tiempo es necesario ahora! ¡Apresúrate!”

 

Inclinando su postura con ojos llenos de sangre, las Mabestias esperaron por un hueco para abalanzarse.

Lidiar con ellos sería imposible si los asaltaran de todas las direcciones. Eventualmente las Mabestias se volverían impertinentes, lo que sería su señal dependía de su paciencia. Eso quizás no podría esperarse.

 

Beatrice: “ーー ¡~hk! ¡El Shamak!”

 

Beatrice junto ambas manos y algo salió completamente del interior de Subaru.

Rodo hacia el remolino dentro de la mano de la chica a un costado, convirtiéndose en un silencioso poder, corrió por el mar de arena y con Subaru y el resto como centro, diez metros a la redonda fueron envueltos en una negra niebla.

 

Con la fundación de la magia de sombras, esta fue la invocación de Shamak.

Produciendo disonancia en la percepción, la extensión de Shamak llevo la conducta de los osos cortesanos a un punto muerto. La concepción se desvaneció más allá de la compresión e incluso el instinto de perseguir la presa se olvidó.

Por supuesto, no mostro sus efectos sobre Subaru y Beatrice, que lo habían ejecutado. Sin embargo, no duraba mucho.

 

Beatrice: “Si entran aquellos más allá del alcance, eventualmente se convertirá en un desperdicio, supongo. ¡Antes de eso, escapa junto con ese dragón de tierra!”

 

Subaru: “¡Lo sé! Aun persiste el efecto de Murak ¿cierto? Si es así entonces cargare a Patrasche sobre mis hombros, en cualquier caso, lo que deberíamos hacer es disparar Shamak continuamente y reunirnos con el carruaje dragón en el otroーー”

 

Abandonando la sala de juegos, a juzgar por priorizar eso, extendió sus manos a Patrasche.

Normalmente su gran cuerpo pesaría varios cientos de kilogramos, pero, durante el intervalo en que estaba adherida al Murak de Beatrice, ese cuerpo, era como una plumaーーeso sería una exageración, se había vuelto ligero. No lo suficiente para poder cargarla al hombro y correr.

Sus ojos amarillos estaban mirando atentamente a Subaru. Las emociones que pasaban por aquellos ojos eran complejas, tan elocuentes que nadie podría imaginar alguna vez que se tratasen de las expresiones de un dragón de tierra.

 

Aquellos ojos estaban diciéndoles. ーーPor favor, váyanse.

 

Beatrice: “ーー ¡Subaru!”

 

Inmediatamente después de que sus ojos quedaran cautivados por el destello en los ojos de Patrasche, Beatrice alzo una aguda voz.

Ella, apresurándose, se dirigió a la palma de Subaru, el creciente poder mágico tomo la forma de un escudo y justo al lado de Subaru llego una pared mágica color violetaーーy desvió el brillo blanco disparado.

 

Subaru: “¡¿Gho~ah?!”

 

Reverbero el agudo sonido como si se tratara de un intercambio de golpes metálicos, y Subaru al recibir el impacto, voló hacia atrás. Desplomándose y cayendo con las extremidades extendidas encima de la arena, Subaru que estaba tosiendo violentamente se dio cuenta tras intentar levantar su cuerpo.

Sangre estaba goteando de su costado derecho, el cual había sufrido el impacto y que tenía la pierna derecha densamente empapada.

 

Subaru: “¿Qué, recibí…?”

 

Presionando el costado desbordando con sangre, Subaru exhalo instintivamente con una de sus rodillas flexionada.

En ese momento, el impacto que había saqueado sus órganos internos dio pie a vomito, y jugos gástricos y sangre brotaron de la comisura de su boca.

Salió aire de su lesionado abdomen y un sonido ridículo como el de un gas se fugó junto con la espumosa sangre.

 

Subaru: “Ah, hf…”

 

Beatrice: “ーー¡baru! ¡Subaru!”

 

Mientras exhalaba roncamente, simultáneamente su campo de visión se inclinó justo hacia su lado.

Cayendo de lado, comprendió que había perdido la habilidad de mover su cuerpo. Lo había entendido, pero nada más que eso podía continuar. La herida en su costado se calentó y allí yacía dolor como si su cuerpo estuviera derritiéndose.

Desesperadamente, escuchó la voz que lo llamaba.

 

Beatrice: “¡Subaru! ¡Subaru, no lo hagas, supongo! Morir es… No, no mueras… ¡No dejes sola a Betty… ~hk! Deten~te…~hk.”

                                                                                   

Su hombro estaba siendo sacudido. Él quería extender su mano a la audible voz entre lágrimas, pero no se pudo mover.

Sus tejidos cerebrales estaban ardiendo, se volvió incapaz de recordar a la niña frente a sus ojos.

Un rostro adorable, pero, estaba llorando, ella no debería tener cara de llanto, es lo que pensó.

 

“ーーーー”

 

Al otro lado de eso, un gran, gran lagarto yacía colapsado.

Negro, era un lagarto con una hermosa apariencia. En ese cuerpo, algo blanco largo y estrecho de desconocida fuente y desconocido origen estaba arremetiendo, sin ningún movimiento, claramente estaba muerto.

 

Quizás, él mismo había recibido la misma cosa, es lo que él pensó.

 

???: “No abandones a Betty, por fa… ~hk!”

 

Sollozando, la niña abrazo desesperadamente el cuerpo de Subaru.

Con ese pequeño cuerpo, el cuerpo de Subaru, que había perdido su fuerza, sería demasiado pesado.

Lagrimas fluyeron por sus mejillas. Él quería al menos limpiar aquellas lágrimas. 

Busco alguna parte que todavía fuera móvil en su cuerpo, pero no pudo encontrar nada. Es por eso que, arrastro algo movible desde algún lugar más, no en su cuerpo.

 

Subaru: “ーー~hk.”

 

???: “¿Subaru?”

 

Invisible a los ojos, la [Mano] que solo él podía ver, limpio las lágrimas en su mejilla.

Dedos negros acariciaron sus lágrimas, y la chica lo miro, haciendo la expresión como si hubiera notado algo. No poseía la fuerza para sonreír y tranquilizarla, ni siquiera eso.

 

???: “Subaーー”

 

Por un solo momento, la niña intento decir algo.

Sin embargo, eso fue interrumpido por la blanca purga que vino volando detrás de ella desde la distancia.

 

“-ーーー”

 

El segundo ataque, arremetió a través del pecho de Subaru.

Lentamente girando su mirada hacia eso, había perforado a través de la espalda de la niña, además, atravesando el pecho de Subaru, salió por atrás.

 

???: “Ah.”

 

Dejando atrás un oscuro suspiro, la forma de la niña, que abrazaba a Subaru desapareció.

Como si ella no perteneciera a este reino, la forma de la niña se volvió invisible.

 

Al perder el apoyo, Subaru colapso en el lugar. No se podía mover. No tenía razón para moverse.

 

Subaru: “Kh, oh.”

 

Sus débiles dedos moviéndose rascaron la arena, eso fue todo.

 

Al perder a su invocador, la niebla negra que estaba interponiéndose en el espacio y los alrededores, fue dispersada por la briza.

Revelándose a la magia que engañaba la percepción, todo lo que quedaba era solo el cadáver de un dragón de tierra y un joven chico al borde de la muerte. La perezosa manada de mabestias saborearon con la lengua y avanzaron más cerca de esa presa.

 

“ーーーー”

 

Su aliento se detuvo, el enfoque de sus ojos se tornó borroso.

No se sentía como la perdida excesiva de sangre. Algo, que se sintió fatal, fue vertido sobre él.

 

Fue incapaz de comprender algo.

Cerca de él, pudo escuchar los rugidos de los osos cortesanos, con sus garras afiladas justo por encima.

 

Aquellas garras se habían balanceado y su cráneo había sido aplastado.

O en lugar de ello, ahora en el borde de su campo de visión que estaba a punto de desvanecerse, [Eso] que había brillado débilmente, fue el culpable.

 

A pesar de no saber cuál de los dos era la razón, la vida de Natsuki Subaru llego a su fin.